
IARA -Instituciones Armenias de la República Argentina- repudia la decisión del presidente de Turquía, Tayyip Recep Erdogan, de reconvertir la milenaria basílica de Santa Sofía de Estambul (antigua Constantinopla) de museo a mezquita, según un decreto del ejecutivo publicado el 10 de julio pasado en el Boletín Oficial. Edificada en 537, la basílica es considerada una joya de la arquitectura bizantina. Santa Sofía fue la catedral ortodoxa bizantina desde su fundación hasta 1453, salvo un período entre 1204 y 1261, en que fue reconvertida en catedral católica de rito latino durante el Patriarcado latino de Constantinopla, fundado por los cruzados. Cuando en 986 se derrumbó su cúpula como consecuencia de un terremoto, el emperador Bizantino convocó para su reconstrucción al arquitecto armenio Dertad, conocido por ser el constructor de varias iglesias de la capital armenia Aní, "la ciudad de 1001 iglesias". Tras la conquista de Constantinopla por el imperio otomano en 1453, Santa Sofía fue transformada en mezquita, función que mantuvo hasta que en 1934, Mustafá Kemal Ataturk, en su proceso de secularización de la República Turca, la convirtió en museo. De esta manera, Santa Sofía se transformó en uno de los destinos turísticos más importantes de Turquía y fue incorporada por la UNESCO a su listado de "Patrimonio Cultural de la Humanidad" en 1985. Con su decreto de reconversión, Erdogan pone en evidencia su total desprecio a los valores espirituales de la civilización universal y hace oídos sordos a las voces que se alzaron en contra de esta decisión. La medida adoptada por el mandatario turco golpea fuertemente la convivencia entre cristianos y musulmanes en Medio Oriente, en línea con su política de intervención militar en la región y el negacionismo reactivado del crimen de genocidio que los Jóvenes Turcos llevaron adelante en la Primera Guerra Mundial contra armenios, griegos, asirios y demás cristianos en el entonces Imperio Otomano. Una vez más, Erdogan demuestra que no será jamás un líder confiable para cooperar en la construcción de un mundo mejor post pandemia. A pesar de que intenta desplegar la imagen de un país que se ha propuesto “cero problemas con los vecinos”, con la llegada de su partido islamista AKP al poder, Turquía suma discordias, atenta contra la paz, fomenta la intolerancia y la enemistad religiosa. La Comunidad Armenia de la República Argentina se suma al repudio de líderes y organizaciones mundiales, esperando una condena similar del gobierno argentino. 13 de julio 2020 IARA - Comunidad Armenia de la República Argentina